Estabámos desesperados por la cantidad de topos que teníamos en el jardín. Nos levantaban el césped, las plantas...todo. Nos cansamos de probar tanto las recetas tradicionales como las que nos daban los entendidos. Hasta que hace un poco más de un mes, mi hijo Luis ( que es el que más me ayuda en el jardín ) llegó con unos paneles solares pequeños.
Según las instrucciones que traían, a veces, al principio, podían provocar la curiosidad de los topos y los atraería, y llegarían hasta el artefacto para averiguar lo que producía unos ruiditos y vibraciones. Despues estas vibraciones y ruidos se harían molestos y escaparían a otros lugares. Ya veis totalmente ecológicos, ni siquiera los mata. Tardaron en ser eficaces y la verdad es que parecía que los atraían en vez de auyentarlos, pero ahora si que empezamos a notar que hay muchos menos.
Por eso hoy mi consejo en vez de parecerse a los trucos o remedios de las abuelas, como os tengo acostumbrad@s, es un truco ultramoderno: "CONTRA LOS TOPOS, PANELES SOLARES".
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